A principios del siglo XX, el antiguo magnate del petróleo Henry Morrison Flagler se interesó por la costa sur de Florida y comenzó a desarrollar una comunidad turística exclusiva. Estableció una línea de ferrocarril que facilitó el acceso a la zona y construyó dos hoteles, con la esperanza de que las familias más distinguidas de Estados Unidos eligieran el lugar para establecerse. Esta modesta comunidad acabaría convirtiéndose en un destino emblemático del país, acogiendo a la realeza británica, estrellas del cine estadounidense y convirtiéndose en el segundo hogar de algunas de las familias más influyentes de Estados Unidos. Con el paso del tiempo, Palm Beach se consolidó como un refugio de lujo sinónimo del glamour del viejo mundo y la sofisticación del nuevo.
En este espléndido volumen, Aerin Lauder, residente de toda la vida y figura destacada de la sociedad de Palm Beach, nos guía por su visión personal del lugar. Desde restaurantes favoritos como Nandos y Renatos, hasta residencias emblemáticas como La Follia y Villa Artemis, nos lleva de compras por la exclusiva Worth Avenue y por los pintorescos senderos de Lake Worth, compartiendo al mismo tiempo las historias, rostros y lugares que han dado forma a la identidad de Palm Beach.