El esplendor colonial, el alma caribeña y el orgullo inquebrantable hacen que Cartagena tenga un espíritu completamente propio. Este tesoro colombiano cuenta con numerosos lugares emblemáticos que no se pueden perder, incluyendo el pastel del Teatro Adolfo Mejía, la famosa Torre del Reloj y la iglesia de San Pedro Claver, construida originalmente por los jesuitas españoles en el siglo XVII. Datada en el siglo XVI, la Ciudad Amurallada, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, está llena de callejuelas adoquinadas, buganvillas y fachadas de color amarillo anaranjado. Sin embargo, el verdadero espíritu de la ciudad se encuentra en los tranquilos momentos cotidianos. Experimente las pintorescas escenas y las vistas extraordinarias que hacen de Cartagena un tesoro de maravillas.
Ciudad de celebraciones, Cartagena a menudo es anfitriona de espectaculares bodas e inolvidables fiestas. El vibrante estilo y la impresionante arquitectura de la ciudad se capturan en "Cartagena Grace", revelando un rico retrato de este animado destino.